martes, 23 de agosto de 2022

CAMINOS Y ATAJOS DEL SUR... CIEN PETACONES ¿QUIÉN DA MÁS?

 

            Contó   Fray  Pedro  Aguado en el capítulo primero, libro undécimo  de la primera parte de su "Recopilación Historial",  que en la Ciudad de Pamplona  del  Nuevo Reino había algunos vecinos, hombres antiguos que habían  estado en Venezuela y de ella habían pasado por el Reino por la falda de la Cordillera y Sierra que cae sobre los llanos de  Venezuela, en la cual habían visto ciertos mogotes o cumbres de sierra metidas en la propia cordillera, nevados  de suerte y que por la mucha nieve sobre ellos caía todo el año, se veían  y divisaba desde muy lejos tierras, eran estos  vecinos de Pamplona los que participaron  en la jornada que hizo  Jorge Espira desde Coro  hacia el sur, en 1535, por la vía de los llanos llegando a la Cordillera que a mano derecha tenía por guía no perdiéndola  de vista,  prosiguiendo su jornada Río Apure, arriba, siguieron por otro  río que con este mismo se juntaba y  que bajaba de las provincias de Santiago, donde ahora está poblada la villa de San  Cristóbal.  En el Nuevo  Reino, tomaron noticia los nuestros, que más arriba  estaba un pueblo más grande, que era  el que ahora es por los de la villa de San Cristóbal llamado el pueblo de las Auyamas por la mucha abundancia, que de ellas allí había.

            El primero del mes de mayo de este presente año de mil setecientos setenta y uno,  yo, Don José Eusebio Guerrero de Librillo, alcalde de la Santa Hermandad de la  Ciudad del Espíritu Santo de la Grita y su jurisdicción por su Majestad, hablándome hoy día de la fecha en el paraje y sitio del cerro El Palmar, derechura que se tomó para buscar la vista del último vado del Río Mocotíes, deslinde de esta jurisdicción con la de Mérida, que se ha tenido desde antiguamente, reconocimiento que fue por mí y los testigos que me acompañan, Don Ignacio Zambrano, Don Eugenio Montoya y Don Agustín Sánchez, pareció ser el derecho, la cumbre del Cerro del Palmar que son cabeceras de la quebrada de Santa Cruz y de allí mirando por derecho a las adjuntas del río San Pablo y quebrada San Antonio y después siguiendo la misma derechura a lo alto de la serranía a dar con un picacho que hace a modo de Pan de Azúcar, prosiguiendo esta derechura al pie de una loma que  llaman  Chuchanco, llevando la vista a la cordillera por lote hasta un riecito que se nombra San Miguel y de allí mirando por derecho, hasta topar con el Río Caparo del paso que se anda por el camino de Mucuchachí.

            Por cuya vereda que va señalada  parece medias el deslinde de dichas jurisdicciones y marcaciones que comprende la pieza de tierras descubierta, corresponde de esta raya y señalamiento atravesando toda la tierra, hasta dar con las tierras de Chaporal y río de Capurí , que compuso  Don Bartolomé  Méndez, difunto, que llaman El Molino, hasta el paso del Río Caparo bajo de cuya demarcación y linderos expresados se compone la dicha pieza de tierra descubiertas.

            Con licencia del Cabildo Justicia y Regimiento de Pamplona partió  Juan Rodríguez Suarez   Capitán  Extremeño  con el fin de conquistar  y explorar en pos de riqueza las tierras de las Sierra Nevada y funda la ciudad de Mérida.

            En el camino de  San Cristóbal a  Mérida  y en hermoso valle de la Cordillera fundó  el Capitán Cáceres, la ciudad de La Grita en 1576.

            Primero de Mayo de 1771, en la  Ciudad del Espíritu Santo de la  Grita.

            Siendo Don Eusebio Guerrero de Librillo  Alcalde de la Santa Hermandad del Espíritu Santo  de la Grita, se han de rematar, una pieza de terreno que se ha descubierto dentro de  esta  jurisdicción  componente de  40 estancias de ganado mayor entre bueno y malo en los sitios denominados Mucutapó, Chacantá y Mucuchachí.

           Repitiendo el pregón se dijo no hay quien puje ni quien dé más... a la una, a las dos y a la tercera, que buena y valida probé.

            Al poseedor y en esta forma se hizo el remate a viva voz en el referido Agustín con beneficio y traspaso "CIEN PATACONES", dan por una pieza de tierra que se ha descubierto, dentro de esta Jurisdicción en los  sitios  Mucutapó, Chacantá y Mucuchachí,  jurisdicción de La  Grita.

           En la Ciudad de Maracaibo a veintiocho del mes de Junio de mil setecientos setenta y  siete, el Sr. Domingo Antonio de Vega, Capitán de las Milicias y regidor perpetuo, alcalde ordinario en depósito por Sm. del señor Diego  Julián Aubar lo que es propiedad y juez  subdelegado de tierras en esta dicha ciudad y su provincia, en vista del remate de las cuarenta  estancias de tierras se expresan hallarse sin ocupar en los sitios de Chacantá,  Mucuchachí  y Mucutapó, que anunciaron los  pretendientes para su venta y composición Don Vicente Molina, Don. José del Carmen Ramírez, Don Basilio Montes, todos vecinos de la ciudad de La Grita, se ha verificado a  Juan Francisco Barrios como apoderado sustituto de los contenidos pretendientes dijo que las admitía y admitió a la venta y composición de dichas tierras y por expresado cantidad para que las hallen, ocupen  y usen libremente sin perjuicio de los naturales.

Autor: Héctor Óscar Vega Contreras

Fuentes consultadas:

Picón Parra Roberto: Fundadores, Primeros  Moradores y Familias  Coloniales  de Mérida. Tomo  I.

Sosa Molina Teodulfo, copia   documentos, alcaldía  Ciudad del Espíritu  Santo de La Grita, remate de tierras descubiertas.


No hay comentarios:

Publicar un comentario